Ingredientes:
- 200 gr de harina de garbanzo
- 400 ml de agua (o algo más si es preciso)
- 1 cucharadita de sal
- 1/4 cucharadita de pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 1 cucharadita de tomillo
- 1 cucharadita de orégano
- 1/2 cucharadita de pimienta negra
- 1 cucharatida de levadura de cerveza (opcional)
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- orégano y pimienta extra
En primer lugar mezclar bien la harina con las especias y la sal. Una vez mezclado, añadir el agua y batir bien. En principio será suficiente con la cantidad indicada. La mezcla ha de resultar más bien líquida (algo similar a la mezcla de las creps). Si os queda muy espesa añadir un poco más de agua.
Incorporar el aceite y mezclar de nuevo.
Dejar reposar la mezcla unos 30 minutos.
Pasado este tiempo, engrasar con aceite de oliva una bandeja de horno rectangular, verter la mezcla y espolvorear de nuevo algo más de pimienta y orégano. También podéis poner queso rallado si lo deseáis (yo en este caso no lo hice).
Precalentar el horno a 220 ºC y hornear durante 20-25 minutos. Si la masa se hincha, pincharla para que baje.
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